lunes, 31 de enero de 2011

EL VALOR DE UNA SONRISA EN TUS CLASES. Hace más una cuchara de miel que cien de hiel


La risa tiene la rara habilidad de ablandar los corazones endurecidos, abrir las mentes cerradas, y generar en los estudiantes simpatía de unos a otros. Es la clave que permite a un profesor llegar a situaciones difíciles, la motivación...

Aquí están algunas de las razones por las que deberían existir más risas en nuestras clases:
Los estudiantes te lo agradecerán.
Cuando haces un esfuerzo para añadir humor a tus clases, las rutinas y actividades, al instante se vuelven más agradables a tus estudiantes , que les hace querer estar cerca de ti y llegar a conocerte mejor. Esto, a su vez, te da un gran poder para influir en su comportamiento.
Es un lenguaje común.
Aunque te puede tomar tiempo para que algunos estudiantes  entren en razón, a todos los estudiantes les gusta reír. La risa es la única cosa que garantiza la construcción de la camaradería y derriba muros sociales y emocionales, hace que estudiantes 
diferentes 
se muestren juntos en una clase feliz.
Es muy fácil.

Se requiere poco o nada  planificación  para llevar más risas a tus salón clases. Todo lo que necesitas es la voluntad de intentarlo. Tus estudiantes podrán apreciar cualquier esfuerzo para mostrarte gracioso.Están preparados para reír. 
Se basa la unión.
Estoy dudoso de los círculos de la comunidad-por lo menos en la forma en que son de uso común.Explicitar los agravios pueden llevar a cosas resentimiento y más que quejarse. Compartir una risa y pasar un buen rato juntos, sin embargo, alivia las viejas heridas y alivia los sentimientos de dolor mejor que cualquier otra cosa.
Se motiva a los estudiantes a comportarse.
El humor puede ayudarle a crear un salón de clases a sus estudiantes encanta ser parte de. Esto, junto con estricta rendición de cuentas , proporciona un gran aliciente para que los estudiantes se comportan. Ningún estudiante quiere revolcarse en el tiempo de espera mientras sus compañeros están compartiendo una sonrisa con su profesor fresco.
Se alivia la tensión.
Muchas aulas están cargadas de tensión. Se puede sentir tan pronto como te acercas a  ellas. Y en poco tiempo las verás excitables, irritables y con mal comportamiento. La risa, sin embargo, puede relajar una clase tensa, liberándola de tensión, calmando las rodillas nerviosas, y llevar alegría a tu aula.
Se fomenta el trabajo duro.
Cuando los estudiantes están felices de estar en tu clase, puedes pedir mucho más de ellos. Aprecian un aula a la que van a disfrutar de todos los días y ellos quieren "pagar" por ello. Es la naturaleza humana. Correspondemos a las personas con las que nos sentimos en deuda.
Facilita el difícil acceso.
El humor tiene el poder de ayudar a hacer conexiones personales con los estudiantes, especialmente con aquellos que son más difíciles de alcanzar. Cuando miro hacia atrás en la mayoría de estudiantes difíciles que he tenido en los últimos años, a menudo puedo apuntar a una broma ocasional o un cuento divertido como un factor importante para ayudarme a darles la vuelta y guiarlos en la dirección correcta.
La cuchara recta
Hay una creencia común de que si utiliza el humor en tus clases, perderás el control de tus estudiantes.
Pero aquí está la cosa.
Si ya tienes un manejo pobre de la clase, entonces sí, es verdad. El tratar de hacerte el gracioso puede volverse en contra tuya. El comportamiento probable que empeore.
Pero si tienes sólidas capacidades de gestión de aula, puedes llevar más risas a tu clase que la harán aún más eficaz.

4 comentarios:

Mª José dijo...

Hola,ya llevaba tiempo sin dejarte un comentario,lo de la jubilación no se sabe cuándo,cuando llevo trabajando desde los 20 años,me ha dejado un poco la moral a cero y la cuesta de enero, y,y...Todo esto para decirte que disculpes lo vaga que ando con los comentarios,te leo y hasta te copio,pero siempre ando apurada.Tendré que plantearme cambiar de profesión para llegar a la jubilación,esto de ser maestra desgasta mucho.Me ha animado tu post y sí me río,hay que reírse y dejar reír.
Besos risueños

Jesús Hernández dijo...

Hola Mª José:
Bueno, sobre la jubilación hay que mirar con sentido del humor las cosas y que vayan viniendo como vengan. Hay cosas que están en nuestras manos y otras que no. No obstante, si que deberíamos hacer algo en las que estuvieran en nuestras manos.
Todos vamos algo liados siempre, sobre todo si nos dejamos arrastrar por el estrés que nos puede causar este ritmo de vida. Por eso, es de agradecer cada comentario que se deje en este blog, que en ningún caso es ninguna obligación, sino, al contrario, motivo de agradecimiento por mi parte. ME alegra que ta hayas reído algo con mi post. El humor es una gran herramienta pedagógica y de vida.
Un abrazo

Julita Fernández dijo...

Jesús, estoy totalmente de acuerdo.
Cuando nosotros vamos a hacer alguna gestión, también nos gusta un trato amable, pues a los alumnos, igual. Cuando el clima de clase es de escucha, empatía, todo va mejor y ¡ojo! esto no va reñido con la exigencia. Al menos, por mi parte.

Jesús Hernández dijo...

Lo cortés no quita lo valiente, pero sin olvidar el gran olvidado: el placer por prender, por aprender.
Saludos
P.D.: tu blog prende, en tus alumnos, en tus visitantes